En esta escena mágica, un grupo de simpáticas hadas se han reunido en las ramas de un gran y amigable roble para disfrutar de un encantador té. Las pequeñas tazas, del tamaño de bellotas, están llenas de delicioso té de flor de miel. Las hadas comparten risas y cuentos mientras saborean pasteles y galletitas servidos en platos de hojas verdes. Rodeadas de flores y mariposas, las traviesas hadas se divierten muchísimo entre los rayos del sol que se cuelan a través de las hojas, creando un ambiente de cuento de hadas en el bosque. Es un momento perfecto de amistad y magia.