En esta escena encantadora, una familia de trolls gentiles disfruta de una tranquila noche de fogata bajo un cielo estrellado. Los trolls, con sus características orejas puntiagudas y amables sonrisas, se sientan alrededor del fuego, compartiendo historias y risas. La luz del fuego ilumina sus caras, creando un ambiente cálido y acogedor. Alrededor de ellos, se puede ver cómo el bosque cobra vida con la presencia de luciérnagas brillando entre los árboles y aves nocturnas observando desde las ramas. Es un momento mágico donde la naturaleza y los trolls conviven en perfecta armonía. ¡Este dibujo es perfecto para dar vida con colores vibrantes y dejar volar la imaginación!